Retos y desafíos de los fabricantes de maquinaria

El sector industrial ha sido tradicionalmente una de las mejores áreas sobre las que tomar el pulso de la economía y el crecimiento y evolución de las sociedades. Hoy es, sin duda alguna, uno de los ámbitos más impactados por la Transformación Digital.

Si se cierra el foco para observar el estado de los fabricantes de maquinaria industrial, los cambios en los últimos 20-30 años son más que notables. A finales del siglo XX, la gran producción de maquinaria industrial se daba en Europa y América del Norte, ámbito en el que los fabricantes gozaban de un gran reconocimiento fruto de la calidad de sus máquinas. Desde ese momento, la apertura de mercados internacionales y la globalización han provocado la entrada de nuevos productores, mayoritariamente asiáticos, que han mejorado sus capacidades productivas y la calidad de sus productos, pero que están en el mercado a un precio inferior.

Ante esta situación en la que los nuevos competidores empiezan a copar la maquinaria estándar, los fabricantes occidentales se centran en la fabricación de maquinaria especial. Pero hoy, iniciado el 2020, puede decirse que el mercado OEM es global, con un producto de alta calidad alrededor del mundo, lo cual implica una comoditización del hardware.

El modo en el que está afectando la competitividad se ve claramente reflejado en lo que se ha llamado ‘Smiling Curve’ de la industria manufacturera. En este gráfico puede verse como la comoditización del hardware otorga más valor a otras fases del ciclo de vida del producto. Anteriormente, la producción era clave en la aportación de valor al producto. Hoy, debido a la presión competitiva, el valor añadido se encuentra o se suma en otras fases, como el caso del I+D+i o de los servicios que están definidos como áreas de gran importancia en la industria manufacturera.

Sumadas ambas situaciones, la genérica del sector industrial y la específica de los fabricantes de maquinaria, puede establecerse que para trabajar y crecer con éxito ha de buscarse la diferenciación y potenciar las áreas donde el cliente encuentre más valor añadido. Y aquí es donde entra en juego la digitalización de las máquinas ya que tiene un impacto directo sobre las fases del ciclo de vida del producto que ofrecen más valor al usuario de la máquina.

Las máquinas conectadas

La digitalización es hoy un impulsor claro en todos los sectores, pero en el caso que se trata en este artículo, se observan dos grandes beneficios. Por un lado, permite reducir el tiempo dedicado a las fases de diseño e innovación gracias a la gran cantidad de información que puede recogerse y analizarse. Las máquinas conectadas son la mejor fuente de información primaria con la que cuentan los fabricantes y mediante esta es posible reducir el Time-to-Market entre el 20 y el 50%. Debe tenerse en cuenta que en un mundo globalizado que se ha ganado el nombre de VUCA (Volátil, Incierto, Complejo y Ambiguo, VUCA por sus siglas en inglés) conocer al detalle las propias máquinas para adaptarse rápido a las necesidades del mercado es sin duda un valor diferencial imprescindible.

Por otro lado, la digitalización tiene un alto impacto en el desarrollo de nuevos servicios, un área de negocio que permite enriquecer hasta un 30% el valor de producto, según las consultoras ATOS y McKinsey & Company y que tiene un peso importante en las decisiones de compra de producto. Un ámbito, el de los servicios, que está creciendo imparable y que impacta directamente sobre la cuenta de resultados. En este sentido, cabe destacar que las empresas de manufactura que tienen más de un 20% de su cuenta de resultados asociado a servicios presentan un EBIT dos puntos mayor que los que se basan exclusivamente en la venta de producto, según ABN AMRO. Empresas que apuestan por servicios abren nuevas vías de negocio de carácter recurrente y dan mayor margen ya que ofrecen un valor diferencial para el usuario de estas.

Beneficios de la digitalización

Ante esta situación marcada por el entorno VUCA y la alta competitividad, ¿qué beneficios aporta la digitalización? En primer lugar, la digitalización recoge y aporta los datos de las máquinas en producción, hecho que permite aumentar el conocimiento sobre los usuarios finales de la máquina y desarrollar servicios que permitan optimizar su proceso productivo. Para ellos se tienen que recoger, tratar y gestionar estos datos mediante una plataforma digital, que puede denominarse ‘service platform’, en la que se integran tecnologías como Cloud Computing, Machine Learning o Inteligencia Artificial y, a su vez, nos provee de herramientas que permiten mejorar el producto mediante la optimización del diseño de las máquinas, mejorar la eficiencia energética de la misma y permite mayor flexibilidad en nuevos diseños.

En el caso de los nuevos servicios a desarrollar, esta plataforma dota al usuario final de herramientas que permiten prever posibles fallos en la máquina, analizar la información para ofrecer sugerencias de mejoras en la producción y, al fin, minimizar los costes de propiedad.

Para poder iniciar rápidamente la digitalización de las máquinas es necesario adaptar tu catálogo al mundo digital sin necesidad de realizar un desarrollo específico de un proyecto IT ni de contar con un equipo nuevo especializado, o añadir hardware específico ya que las máquinas se diseñarán con productos IIoT ready, conectados de base.

Encontrar un partner de confianza que te facilite el camino de la transformación digital es un factor que se antoja clave para el devenir de los fabricantes de maquinaria. De esta manera puede incorporar el conocimiento necesario de manera rápida, así como los productos que permitan adaptar sus productos a su estrategia digital. Schneider Electric te ofrece la plataforma, con la que gracias al controlador y la plataforma cloud de servicios, explotar la información de tus máquinas se convierte en una labor cotidiana.

En resumen, los fabricantes de maquinaria se han caracterizado por ser un sector innovador que ha sabido adaptarse a los cambios del mercado y a las exigencias de sus clientes y los consumidores finales. Hoy, la digitalización les permite estar más cerca de sus clientes, adaptarse de nuevo abriéndose a nuevos modelos de negocio basados en servicios que incorporen las últimas tecnologías de recogida y análisis de datos.